Un adorable perro que fue abandonado y dejado a su suerte ha aprendido a caminar y correr en dos patas.
Putol nació solo con sus patas delanteras, pero nunca permitió que su discapacidad le impidiera avanzar. Como se muestra en este lindo video, este canino de seis años ha aprendido a correr sorprendentemente rápido sobre sus dos patas delanteras gracias a su nuevo dueño, Danilo Codilego Jr.
Putol, que significa “cortado” en el idioma tagalo de Luzón, Filipinas, se le ve con frecuencia corriendo junto a otros perros y explorando las calles y zanjas del vecindario Casiguran en Quezon City.
Tomémonos un momento para reflexionar sobre la realidad de que a esta pobre chica la hayan apodado “cortada”. Un nombre que es a la vez сгᴜeɩ y adorable.
A pesar de su nombre dudoso, la cachorra es una gran atracción en el vecindario debido a su valentía y entusiasmo por la vida.
El conductor de camiones local, Danilo, dijo: “Nos conocimos hace seis años. En ese momento, yo trabajaba en una panadería. Un día, un compañero de trabajo llegó con cuatro cachorros. Estaba tratando de venderlos por 5000 pesos (£115/$151) cada uno.
“Los otros cachorros fueron vendidos, pero nadie quería a Putol, la pobre cachorrita de dos patas”.
Nada te afecta tanto como ese comentario.
“No esperaban que sobreviviera mucho tiempo”, continuó Danilo. “Yo fui el único con la fortaleza para cuidarla. Tomamos riesgos porque sentíamos lástima por ella.
“No podíamos pensar en otro nombre que no fuera Putol”.
¿No se les ocurrió nada más? Molly, Coco, Willow? Yo mismo puedo pensar en tres ahora mismo, colega.
Putol no podía caminar durante los primeros dos años de su vida, pero gradualmente aprendió a equilibrarse sobre sus patas delanteras y pronto le tomó el truco. Ahora patrulla la propiedad y es ferozmente protectora de su dueño.
“Putol actúa como un perro guardiáп, ladra cuando se acerca un desconocido”, explicó Danilo. También se pone celosa cuando le presto atención a otro perro. De lo contrario, es un miembro amable y querido de la comunidad.
“No tiene problemas cuando tengo que viajar por trabajo, ya que todos la cuidan. No es exigente. Le gusta lo que comemos. Pero no puede tener cachorros debido a su enfermedad”.
Creemos que los cachorros son lo último en lo que ella piensa; ¡está demasiado ocupada divirtiéndose!