Perder a un animal siempre es una sensación desgarradora, ya que estos pequeños amigos peludos se convierten en parte integral de nuestro corazón. Hace aproximadamente ocho años, Tia Gao dejó a su perro al cuidado de su vecina mientras ella tenía que atender a su madre enferma. Sin embargo, al no estar en su entorno familiar, el perro se ponía muy nervioso con la persona que lo cuidaba, siempre intentando escapar.
Meses después, cuando Tia regresó a casa, descubrió que su amado perro, Dudou, se había escapado. Comenzó así una larga búsqueda que duró meses, pero no se encontró rastro alguno del perro. Pensó que lo había perdido para siempre, y para empeorar las cosas, tuvo que mudarse a 7 kilómetros de su hogar anterior. Sin embargo, ocho años después, ocurrió un milagro.
Superar la pérdida de un perro es realmente imposible, ya que se llevan consigo un pedazo de nuestro corazón. Cuando Tia se mudó a 7 kilómetros de su hogar, todas sus esperanzas de volver a ver a Dudou desaparecieron por completo.
Sin embargo, a veces suceden cosas que realmente hacen creer en los milagros. Ocho años después de su desaparición, Dudou pasó frente a la tienda de Tia, observando a los clientes del negocio hasta que encontró la mirada de su dueña. La mujer no podía creer lo que veía.
Esta historia es realmente increíble, tanto que la familia aún no puede dar una explicación de lo sucedido. El cachorro nunca olvidó el olor de su familia, luchando cada día por encontrarlos. Además, Dudou no volvió solo, sino con otro perro, que aparentemente es su hijo. La familia decidió adoptarlo también.
Ahora los perros viven felices junto a su familia, que agradece al cielo cada día por permitirles reencontrarse con su amado cachorro.