A finales de mayo, la Sociedad Humanitaria del Condado de Lebanon (HSLC) en Pensilvania recibió una llamada urgente de la policía local y los bomberos sobre un perro atrapado en una alcantarilla.
En un principio, el perro parecía estar muerto, pero cuando quitaron la rejilla de la alcantarilla, levantó lentamente la cabeza.
Un voluntario y un miembro del personal acudieron de inmediato al lugar, sabiendo que probablemente se necesitaría atención médica; fue una escena devastadora.
El perro, delgado y débil, se había acurrucado en una bola y estaba claramente cerca de la muerte.
El cachorro fue rescatado con cuidado, cargado y llevado a un veterinario de emergencia para recibir atención médica inmediata.
El dueño del perro fue localizado rápidamente; Buddy, el perro de 15 años, había estado desaparecido durante tres semanas.
“Hicimos intentos para reunir a Buddy con su dueño después de regresar a la HSLC.
Lo intentamos varias veces. Dado que Buddy y lo que necesita son el enfoque principal de la historia, no entraremos en demasiados detalles.
Buddy recibió tres días de atención médica de emergencia para salvar su vida. Su condición comenzó a mejorar lentamente.
Y ciertamente, Buddy ha mostrado una tremenda mejoría, pero es un anciano que requiere citas médicas de seguimiento, ultrasonidos, radiografías y una cita con un oftalmólogo.
Además, la edad de Buddy impide que se le administren sedantes, por lo que encontrar un hogar de acogida cariñoso y paciente sería la mejor opción.
El refugio continuará pagando todos sus gastos médicos, así como su comida y vitaminas.
Buddy parece no tener problemas con los gatos y se lleva mejor con perros tranquilos.
“El mundo está lleno de negatividad, tristeza y sucesos que no terminamos de comprender.
Por favor, centrémonos en la amabilidad, el apoyo y la curación, ¡y encontremos un hogar de acogida para Buddy! ¡La jornada continúa… para Buddy”.