Una pastora alemana que casi se ahogó después de que sus dueños la ataran a una roca y la arrojaran al río ha encontrado un nuevo hogar después de meses de recuperación en un centro de animales.
Bella, de 11 años, fue rescatada del río Trent en enero del año pasado por la transeúnte Jane Harper, quien la vio debatiéndose en el agua, donde había estado luchando durante horas después de que la dejaran morir.
Después de 15 meses de rehabilitación con la RSPCA, la perra de 11 años ha encontrado un nuevo hogar en el sur de Derbyshire con Maggie Mellish, de 79 años, y Charlie Douglas, de 70 años, después de un llamamiento televisivo.
La pareja jubilada se describe como “la pareja perfecta” para Bella, y Charlie revela: “Nos horrorizamos por lo que le sucedió a Bella y cuando fuimos a verla nos dimos cuenta de la gran personalidad que tiene y realmente es perfecta para nosotros”.
Se dijo que Bella tuvo suerte de sobrevivir a su calvario en el agua helada y posteriormente se descubrió que tenía una variedad de problemas de salud complejos.
La antigua dueña de Bella, Charlene Latham, de 32 años, fue condenada a una orden comunitaria de 12 meses el mes pasado después de declararse culpable de causar sufrimiento innecesario a su mascota.
Tras ver el llamamiento en la prensa, Maggie y Charlie se pusieron en contacto con el centro de animales.
“Sabemos que necesitará visitas veterinarias regulares y estamos dispuestos a financiarlas”, dijo Maggie. “Sabemos que está en sus últimos años, pero solo queremos ofrecerle un hogar amoroso que se merece después de todo lo que ha pasado”.
La noticia llega semanas después de que un nuevo proyecto de ley respaldado por el gobierno que introduce castigos más duros para los abusadores de animales pasara por la Cámara de los Comunes.